No podemos ignorar el hecho, de que la mayoría de los políticos con ciertas funciones en el estado, nos tienen acostumbrados a todos, con multiples anuncios , fotos, reuniones, etc. Sin dudas que parte de la política es construir consensos, equipos y desarrollar lazos humanos, pero cada cosa en su lugar. Es entendible que quienes aspiran al poder ejecutivo traten de avanzar en alianzas, sumar afiliados, posicionarse como candidatos, etc, ya que están intentando alcanzar un lugar para poder gestionar, y trabajar para mejorar algo. Pero quienes ya están en un cargo ejecutivo, su principal actividad debería centrarse en hacer funcionar lo que ya se ha pactado. Revisar con rigurosidad las leyes de cada ámbito,es importantísimo y sin embargo es algo que se ha abandonado. Para afirmar esto, hace tiempo que suelo preguntar a los mismos actores, si toman tiempo en revisar el área legislativa, y en la mayoría de los casos me han contestado que no alegremente, como si fuera un detalle o un por menor. Sin embargo la población espera con desespero que los poderes ejecutivos ordenen el caos que sufre nuestro país por estos días. Se escuchan todo tipo de ideas de corte iluminista, con soluciones que constan de asistencias económicas, como si todo problema se resolvería dando plata. Estos garantismos absurdos enardecen al ciudadano, y cada día se siente menos representado con un profundo rechazo a los políticos. No todos son lo mismo,pero el desorden es mucho. Vemos objetivamente, que la comunicación de las gestiones en la mayoría de los casos, tratan de gastos que el estado hizo, reuniones sobre promesas a futuro, supuestas soluciones que llegan para cada área, pero al mismo tiempo, es noticia todo el tiempo la ausencia de ley por todos lados. Un delito, es la irrupción de la ley, cuándo un derecho es vulnerado, cuándo alguien abandonó su responsabilidad. El estado, debe gestionar también las herramientas necesarias que garanticen un orden, donde toda la estructura social, sea orientada al estado de derecho, al orden cívico. Por ej; si sabemos que hay problemas de tránsito por ausencias de señaleticas, por ausencia de semáforos, el estado debe enfocarse en abarcar con planificación esa área. Para que luego la justicia, en el orden necesario juzgue con racionalidad a quienes cometen un delito lisa y llanamente. La solución es evidente en estos casos, y no se soluciona con promesas, juntaderas e involucrando comisiones, haciendo marketing, reformulando el pensamiento, sacando fotos, buscando excusas, etc. En algún momento, tienen que tomar la determinación de volver a visualizar el estado seriamente. No puede haber avance en la construcción de una sociedad si no se vuelve a tener la ley como eje central de los pueblos. Luego algunos enfatizan en sobremanera sobre la responsabilidad ciudadana, y no está mal, pero donde no hay ejecución de los acuerdos antes establecidos, tampoco hay delito. Volviendo al ejemplo anterior, no se puede culpar a una persona no Vidente de estacionar mal, cuando no hay ninguna señalización como corresponde, como sucedió días atrás en nuestra ciudad. Se nota mucho, que se pierde demasiado tiempo desde el estado montando acciones y secuencias que no son más que la evasión de la responsabilidad. No se puede tapar el sol con el dedo. Todavía estamos a tiempo, es urgente que se vuelva a la ley.